28 noviembre 2019
SIN RASTRO DE ELLOS
No sé por qué
pero estaba seguro
de que no volvería,
a pesar de haber convivido
en una casa sin puertas,
de haber reído con las penas y los sueños,
a pesar de haber compartido heridas
de cicatrices indelebles,
de haber musicado mano a mano días y años,
a pesar de haber escaneado las estrellas
de cientos de ciudades,
de haber asesinado tan temprano la navidad,
de haber instalado un “parasoledades”
en las orillas del orgullo,
a pesar de haber contado
cada céntimo de euro de la verdad.
No sé por qué
pero estaba seguro
de que no volvería,
no sé si sería ella,
no sé si sería él.
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Enigmáticos versos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Para despejar un incógnita. Abrazos.
EliminarOh qué extraño poema, tiene cadencia y musicalidad,y sobre todo como dices...incógnita!
ResponderEliminarme ha encantado!
La verdad, es que quería cerrarlo así, pero igual no está bien expresado. Gracias Luna y abrazos.
EliminarSe quedaron en otro mundo y en otro tiempo... igual allí siguen felices.
ResponderEliminarSaludos.
Seguro que sí, ese mundo lo tejieron cada uno en su cabeza.
EliminarCuántas veces nuestras certezas se materializan al revés.Serían los dos y por eso no hubo discrepancias. Un abrazo
ResponderEliminarPues es un buen final, aunque la tragedia es una aliño que le sienta bien a ciertos poemas. Abrazos.
EliminarA veces sabemos sin saber por qué.
ResponderEliminarUn beso, Xan.
Ya, y a veces nos gustaría no estar tan seguros de ciertas cosas. Besos Carmela.
EliminarSin duda el mejor poema que te he leído
ResponderEliminarclaro, desde mi humilde opinión.
Sólo queda disfrutar de él
enhorabuena!!!!!
Me alegro que te haya gustado, me encanta como escribes así que este comentario es más relevante para mi. Gracias.
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