Nunca esperé,
aquella llamada
que no me hiciste,
ni los tangos
que se agarraban al después.
Tampoco el verano
que jugaba
con tres ciegos al escondite.
Pero vino,
y agua de otoño triste,
melodías que arañaban
antes de parar de escucharlas,
pasaportes roídos
por los ratones del insomnio.
Me niego a guardar,
tanta sal de lágrimas
en cántaros de barro agrietados.
No somos viejos,
pero son las mismas situaciones,
las que vuelven a poblar
estos papeles,
que para persistir se marchan
con lo único que queda,
la pobreza
de no saber
hacerse
entender.
A veces los caminos del entendimiento distan unos de otros caminando juntos aun con distintos pasos… Quizá no haya que guardar esas lágrimas para que nuestros (sus) ojos vean con más claridad…
ResponderEliminarHermosos y sentidos versos, mi querido Xan… Siempre un placer leerte…
Bsoss enormes, y muy feliz finde.
Gracias Gine, guardar lágrimas nunca es bueno, pero a veces es inevitable. Abrazos.
EliminarAraña la mirada cada verso, pero es que así es el desamor, un gato al agua que se esmera en salvarse de la humedad.
ResponderEliminarHay llamadas que no se desean nunca. Un poema tan sentido y tan lleno de latidos.
Mil besitos, amigo Xan.
Hay llamadas que parece que nunca van a llegar pero al final llegan, gracias Auro. Abrazos.
EliminarA veces no se es, mi en el espacio ni el tiempo, cuesta entender, bellos versos, Do
ResponderEliminarBeso
Y cada vez más. Gracias Do. Abrazos.
EliminarEl desamor, que nos hiela,que duele y nos crucifica muchas veces..
ResponderEliminarse te echaba de menos Xan! Precioso tu poema! como siempre...
Gracias Luna, siempre gracias. Un abrazo.
EliminarEsa pobreza es de las peores.
ResponderEliminarSentidos y precioso versos.
Un abrazo Xan.
Un pobreza que se agarra a la soledad. Gracias Carmela. Abrazos.
EliminarEncántame a musicalidade que crean os teus poemas na miña mente. E as sensacións que me recorren despois de lelos. Incluso a tristeza leva un toque ledo se vai da man dos teus versos. Saúdos :)
ResponderEliminarMoitas grazas polas túas palabras, todo axuda nesta vida tola que levamos. Apertas.
Eliminaren el amor los deja vú son cosa rutinaria
ResponderEliminary el ala queda cansada de intentar vuelos
cuando el otro no da cuenta del ruido
y sigue tozudo en el entendimiento
abrazos poeta
La rutina no arde en las hogueras del miedo, acaba ahogando el fuego. Gracias Elisa, abrazos gran poeta.
EliminarAunque no esperemos,en un momento vuelve a asomar la vida y los recuerdos pasados.
ResponderEliminarY llenamos cántaros de lágrimas (me ha gustado esta figura)porque la emoción nos puede.Además no es malo que el llanto brote,es necesario.
Muy bello poema ,amiguco
Besucos
Gó
Sin duda muy necesario, gracias por tus palabras. Un abrazo.
ResponderEliminarNo sólo es importante hacerse entender.
ResponderEliminarEntender al otro y aceptar a veces cuesta tanto o más que un simple raciocinio.
Besos.
Nostálgico poema .
Muchas gracias Amapola, aceptar es siempre tan difícil. Un abrazo.
EliminarLa vida se repite.
ResponderEliminarEs un círculo deslucido por el tiempo.
En mi opinión te expresas con la claridad del que se sabe hacer entender, son los demás los que a menudo no quieren entender, no hay arreglo posible.
ResponderEliminarGracias Kiffi, necesitaba un poco de entendimiento. Abrazos.
Eliminarpasaportes roídos
ResponderEliminarpor los ratones del insomnio.
La imagen de estos versos es preciosa e intensa.
a veces cuesta hacerse entender en el lenguaje del amor,sentidos y melancolicos versos que se disfrutan al leer.
Saludos.
Me alegra que te hayan gustado, muchas gracias. Un abrazo.
EliminarNo guardes nunca lágrimas tras el cristalino de la palabra, ni tampoco hagas altar a la memoria fingidamente olvidada.
ResponderEliminarQuiebra la métrica a la soledad y hazte entender haciendo lo que sientes en cada momento (de a brigo o ausencia) de FE en cada , de vIDA, calada.
Abraz☆ SIEMPRE
Las lágrimas no se guardan, pero se guarda la el dolor de la bala que te hizo llorarlas, a veces vuelven porque tienen que volver, pero los ríos de lágrimas siempre acaban desembocando en el mar y cuando lo alcanzan llegan las sonrisas marea arriba.
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