Sobrevivo respirando tu
esencia,
cuando eres viento austral,
y yo, por ti, un loco pirata
insurgente,
incapaz de poderte domar.
Condenado a escucharte
silbando por las caracolas,
de las playas de mis oídos,
sin alcanzar a entenderte.
Tú, que desplazas las
tormentas,
para que no se instalen en mi cubierta,
tú, que eres la ira,
convertida en belleza.
Tú que tersas y ondeas,
la calavera que pinta mi negra
bandera,
enlutando temor a mi anuncio de
guerra.
Tú, que me llevas,
de tierra a isla,
de isla a tierra,
de ciudad a vereda.
Tú que resecas la salitre,
que endurece mis sueños
amargos,
haciendo de ellos,
las bolas de cañón que
disparo.
Tú, que soplas y soplas de mi ahuyentando,
las falsas caricias y abrazos,
que seduciéndome en tierra me
engañaron.
Tú, que te vas,
desabrigando las noches,
que te enfriaste en las aguas
del más allá,
para luego volver como brisa,
viento y huracán,
haciendo de mí: “ un hombre
esclavo ”,
“ pirata en libertad ”.
Simplemente es mágico. Tus barcos,tus vientos, tus todo.
ResponderEliminarIncreíble como escribes, "pirata"!
Gracias por tu aliento.
ResponderEliminarPirata, quien fuera tu princesa!!!!!
ResponderEliminarYo no me iría! !