MI VIDA EN TÍ

Admito que mi vida,
solo se supedita a ti,
vivo como un nómada,
que no sabe viajar para encontrar,
vivo al ritmo de tu fruto,
tu beso dulce, amargo, efímero,
me da igual, me da la paz.

Sé que te necesito,
más que necesito viajar,
también sé que no debo
pero no lo quiero evitar.

Soy un torrente perdido,
que no encuentra el mar,
y las lascas del ovido,
ya no me hacen sangrar.

Canción de mi corazón,
llámame por siempre,
teñida hasta la médula,
de libre y descontrolada pasión.

Y llévame al crepúsculo del infinito,
que allí podré increparte,
siendo el de siempre, siendo yo mismo.
Porque a mis ojos,
tu imperfección siempre será perfecta,
cuando muera el día dejándonos a ciegas,
cuando salga el sol que te despierta.